¿Por qué usar tarjetas de crédito? Es una pregunta que muchos se hacen, ya que existe la creencia de que estas tarjetas son sinónimo de deudas, altas tasas de interés y problemas financieros. Yo siempre he recomendado como educar financiera que las tarjetas son una herramienta para generar abundancia.
Pensemos. Si le damos un cuchillo a un chef profesional, probablemente logrará cocinar un plato que enamore a nuestro paladar. ¿Qué pasa si se lo damos a un niño de dos años? Lo más probable es que jugando con él pueda hacerse daño. Es lo mismo con las tarjetas de créditos, quien este capacitado para usarlas podrá exprimir de una manera más fructífera sus beneficios.
Por eso me gustaría que frente a esta situación enmarquemos en nuestra cabeza la siguiente frase cuando suelo abordar este tema: “La realidad es que las tarjetas de crédito pueden ser una herramienta valiosa si se utilizan de manera adecuada”.
Como en muchas cosas de la vida, debemos pensar fuera de la caja y observar a este instrumento financiero como algo más que un pedazo de plástico. Si se usan las tarjetas de crédito con sabiduría y se paga el saldo a tiempo, las tarjetas pueden ser una herramienta poderosa para hacer frente a situaciones imprevistas y para llevar un control de los gastos. Si, por otro lado, se usan de manera irresponsable, las tarjetas pueden causar grandes problemas financieros, y es por eso que las personas que en su momento no supieron usarlas te aconsejaran evitarlas.
Es importante tener en cuenta que no hay una «mejor tarjeta de crédito», ya que cada persona tiene necesidades y preferencias diferentes. Si lo que buscas es un método para poner límites a tus gastos y evitar sobre girar en tu cuenta, la mejor opción puede ser utilizar la tarjeta de crédito como si fuera de débito. De esta manera, no tendrás que preocuparte por pagar intereses, ya que sólo gastarás el dinero que tienes disponible en tu cuenta.
Entre los beneficios de las tarjetas de crédito esta la posibilidad de ayudarte a construir un historial crediticio positivo, algo que puede ser útil en el futuro si alguna vez necesitas pedir un préstamo o crédito hipotecario. Además, muchas tarjetas ofrecen recompensas como puntos bonus, millas para viajar con mayor comodidad a menor precio, cashback para tener un retorno en los gatos y descuentos con las empresas que han formado alianzas, que pueden ser aprovechados si se utilizan adecuadamente.
Por eso insisto, escoger una tarjeta de crédito no es fácil. Es importante elegir una que se adapte a tus necesidades y preferencias, y utilizarla de manera responsable. Si lo haces, podrás aprovechar los muchos beneficios que las tarjetas de crédito tienen para ofrecer y mejoraras relaciones con el banco para futuros proyectos.