En los últimos años, el panorama de los medios de comunicación ha experimentado una transformación radical. La irrupción de plataformas digitales como TikTok, Instagram Reels, snapchat, youtube reels, etc. ha generado un cambio en la forma en que las audiencias consumen contenido audiovisual, afectando la relevancia de la televisión tradicional. Sin embargo, lejos de desaparecer, la televisión ha mostrado una notable capacidad de adaptación. En este artículo reflexiono sobre la convergencia de la televisión tradicional y las plataformas digitales, analizando las ventajas, desafíos y lecciones que ambos medios pueden aprender mutuamente en un entorno mediático en constante evolución.
El Impacto de las Plataformas Digitales en la Relevancia de la Televisión Tradicional
La aparición de plataformas digitales ha fragmentado -definitivamente- la atención de la audiencia, especialmente entre los jóvenes. Las plataformas digitales en suma ofrecen un contenido breve, visualmente atractivo y altamente compartible, lo que ha generado una disminución en la audiencia de la televisión tradicional, especialmente en el consumo de entretenimiento ligero. A pesar de esta disminución, la televisión mantiene su relevancia en ciertos contextos. Eventos en vivo, programas de noticias y algunas “grandes” producciones de entretenimiento continúan siendo dominio de la televisión, gracias a su capacidad de congregar audiencias masivas y ofrecer información con relativo y cuestionable estándar de calidad.
La televisión ha respondido a este desafío adaptándose a las nuevas demandas de consumo. Los canales tradicionales han comenzado a ofrecer versiones abreviadas de sus contenidos y han incrementado su presencia en redes sociales, promoviendo sus programas mediante fragmentos virales que buscan atraer a la audiencia joven hacia la programación televisiva completa.
La transformación del consumo audiovisual y las ventajas competitivas de la televisión
El contenido en platafotmas digitales, que contienen redes sociales, se caracteriza por su brevedad y dinamismo, aspectos que han redefinido las expectativas del consumo audiovisual. No obstante, la televisión sigue teniendo ventajas significativas en términos de calidad de producción, recursos técnicos y la capacidad de ofrecer narrativas relativamente más complejas. Este medio cuenta con los presupuestos y la infraestructura necesarios para desarrollar historias más profundas, una característica que lo mantiene relevante en la producción de ficción, noticias y algunos eventos en vivo que se equiparan cada vez más a los conocidos “lives” o en vivos de las mencionadas RRSS.
La capacidad de producir contenido de alta calidad permite a la televisión ofrecer narrativas visualmente impactantes, algo que las plataformas digitales aún no han logrado replicar completamente. Además, la televisión tradicional sigue siendo – ante la mirada del usuario o receptor masivo y tradicional – una fuente confiable de información verificada, especialmente en contextos críticos, lo que refuerza su posición en temas noticiosos y documentales.
Adaptación y convergencia: La estrategia de la televisión para atraer audiencias jóvenes
En un esfuerzo por adaptarse a las nuevas formas de consumo, la televisión ha comenzado a adoptar estrategias propias de las plataformas digitales. Los canales de televisión han lanzado sus propias plataformas de streaming y han incrementado su presencia en redes sociales, buscando atraer a las generaciones más jóvenes. Este cambio no solo implica la adaptación de formatos, sino también la diversificación de narrativas y estilos, incorporando elementos de inmediatez y participación interactiva propios del entorno digital.
Además, la televisión ha aprendido a valorar la importancia del contenido visualmente atractivo, corto y conciso, características que definen el éxito en plataformas digitales. En este sentido, la adopción de algoritmos y la personalización del contenido en sus plataformas de streaming son claros ejemplos de cómo la televisión está siguiendo las tendencias digitales para mantenerse vigente.
La credibilidad en la era digital: Comparación entre televisión y plataformas digitales
La credibilidad es uno de los aspectos que ha diferenciado a la televisión tradicional de las plataformas digitales. Mientras que la televisión sigue siendo percibida – en buena medida – como una fuente confiable de información, especialmente para audiencias más adultas, las plataformas digitales enfrentan el desafío de la verificación de contenido. No obstante, esta percepción de credibilidad está cambiando, especialmente entre las audiencias jóvenes, quienes tienden a confiar en influenciadores y en contenido generado por sus pares.
Este cambio ha llevado a una colaboración entre ambos mundos, donde los creadores de contenido digital están siendo incorporados en programas televisivos, aportando autenticidad y conexión directa con audiencias específicas. De esta manera, la televisión no solo mantiene su credibilidad, sino que también se adapta a las nuevas expectativas de consumo.
El rol de las redes sociales en la promoción del contenido televisivo
Las redes sociales han demostrado ser un aliado clave para la televisión. Permiten extender la vida útil de los programas más allá de su transmisión original mediante fragmentos virales, publicaciones de fans y contenido exclusivo. Las cadenas televisivas utilizan plataformas como X, Instagram, Youtube y TikTok para complementar la narrativa de sus programas, lo que les permite atraer a nuevos espectadores y mantener la relevancia de su contenido en un entorno digital.
Además, las redes sociales sirven como plataformas de interacción directa con la audiencia, generando una retroalimentación en tiempo real que enriquece la experiencia televisiva. La televisión ha integrado características digitales como encuestas en directo (QR, Forms) y comentarios en tiempo real, acercando su contenido a las dinámicas participativas propias de las redes sociales.
La coexistencia de la televisión y las plataformas digitales: Hacia un futuro convergente
La coexistencia entre la televisión y las plataformas digitales parece inevitable. Ambos medios se están adaptando mutuamente para aprovechar sus respectivas fortalezas. La televisión seguirá destacándose en la producción de eventos de mayor robustez en terminos de esfuerzos de realización, noticias y producciones que ameritan una mayor calidad, mientras que las plataformas digitales dominarán en el contenido rápido e interactivo. En este sentido, la televisión se enfrenta al desafío de integrar estrategias digitales sin perder su identidad basada en la calidad y la credibilidad; identidad que cada vez más es adoptada y reflejada por las plataformas emergentes.
La televisión y las plataformas digitales, concluyendo experimentalmente, no son necesariamente competidores, sino partes complementarias de un ecosistema audiovisual en constante evolución. La televisión puede aprender del dinamismo, la personalización y la inmediatez de las plataformas digitales, mientras que estas pueden beneficiarse de los estándares de calidad y la capacidad de producción que ofrece la televisión. El futuro de ambos medios dependerá de su capacidad para adaptarse a las nuevas formas de consumo sin perder de vista sus ventajas intrínsecas. La convergencia entre la televisión tradicional y las plataformas digitales es un proceso en desarrollo que seguirá marcando el rumbo del consumo audiovisual en la era digital.