De acuerdo con estudios pasados, los productos que se autodenominaban ecológicos no eran del todo bien vistos por el público. Sin embargo, una reciente investigación de Alexander Chernev, profesor de marketing en Kellogg School of Management, demuestra un giro importante en el mercado.
Por años, los consumidores han percibido a los productos ecológicos como bienes poco efectivos comparados con sus alternativas tradicionales. Desde enjuagues bucales hasta empaques, los artículos que no dañan el medio ambiente han sido juzgados en la mente de los posibles usuarios, en términos de calidad y confiabilidad. Ello, sin duda, se convirtió en el principal desmotivador de producción para las empresas. Apostar por una categoría con mala percepción hubiera sido una decisión de locos. No obstante, la investigación de Chernev aplicada a más de 3.300 personas brinda nuevos incentivos. Concretamente, los hallazgos del profesor y sus colegas evidencian que la percepción ha cambiado para bien.
Según el estudio, en estos tiempos los consumidores sí valoran los productos que impactan positivamente en la sostenibilidad del medio ambiente. Las razones del giro podrían estar relacionadas al aprendizaje ganado por las organizaciones en los últimos años. Actualmente, es posible encontrar artículos ecológicos con igual o mejor efectividad que sus pares altamente procesados. Asimismo, se ofrecen en diversas presentaciones, plazas y, sobre todo, con precios competitivos. En el pasado, ecología podía ser sinónimo de caro. Ahora bien, ¿basta con una linda noticia para empezar a penetrar el nicho de la sostenibilidad? Obvio que no. Compañías y emprendedores no deben dejar pasar estas recomendaciones si desean incursionar en el mundo ecológico:
- Educar.– La categoría sigue siendo un niño en crecimiento. Es necesario educar a los consumidores respecto a los usos y bondades de los bienes ecológicos.
- Atender.- Los nichos necesitan ser bien atendidos. Un servicio postventa es crucial en el segmento de la sostenibilidad.
- Testimoniar.– Para ganar más adeptos nada mejor que mostrar casos reales. Imprescindible contar con testimonios de clientes frecuentes.
El cuidado del medio ambiente es un deber de todos los que habitamos el planeta. Esto requiere estrategia, compromiso y comunicación; tres variables que los jugadores empresariales gestionan a diario y que podrían situarlos como referentes en nuestras sociedades.